Jesús Cano, Carlos Fernández y Valentino Gianuzzi.
El II Congreso Internacional de Escritores para la Defensa de la Cultura se celebró en España entre el 4 y el 13 de julio de 1937 y reunió a una parte importante de la intelectualidad internacional de izquierda, que veía en el surgimiento del fascismo una de las mayores amenazas para la política europea, y que tenía como misión primordial la defensa de la República española.
El congreso, que fue uno de los muchos eventos de propaganda organizados por la República durante la Guerra Civil, ha sido seguramente el de mayor resonancia histórica, sobre todo por los nombres, ahora célebres, de los escritores participantes.
César Vallejo, el representante peruano, tomó parte en el congreso con un discurso, “La responsabilidad del escritor”, leído en el auditorio de la Residencia de Estudiantes de Madrid el 6 de junio. Hubo, además, tres sesiones finales en París, entre el 16 y 18 de julio, precedidas por un buffet de bienvenida el día 15, donde algunos de los escritores e intelectuales pudieron dar sus testimonios acerca de lo visto en el territorio español.
Aunque no se tiene ninguna información de que Vallejo haya leído algún discurso durante las sesiones parisinas, parece muy probable que las palabras que rescatamos ahora hayan sido emitidas por el poeta peruano durante estos días. Sus declaraciones fueron publicadas el 1 de agosto de 1937 en el periódico mexicano El Machete, órgano del Partido Comunista. La trascendencia del II Congreso Internacional de Escritores para la Defensa de la Cultura no pasó desapercibida para esta publicación mexicana.
Además de las palabras de César Vallejo, los días 22 y 29 de agosto de 1937, El Machete incluye un reportaje de Ángel Gaos en el que resume algunas de las intervenciones del Congreso, glosando probablemente el número especial de la revista Hora de España dedicado, ese mismo mes, al encuentro. Las declaraciones se han podido rescatar gracias a la iniciativa del proyecto de investigación El impacto de la Guerra Civil Española en la vida intelectual de Hispanoamérica (impactoguerracivil.blogspot.com)
Las palabras emocionadas de Vallejo parecen avalar la hipótesis de que lo visto durante esos días en España caló profundamente en el espíritu del poeta y fue uno de los causantes del impulso creador que dio como resultado España, aparta de mí este cáliz.
(El Machete, México, 1/08/ 1937)
CÉSAR VALLEJO, EL POETA PERUANO A SU REGRESO DE ESPAÑA, NOS DICE:
César Vallejo acaba de regresar de España a París. Contestando a algunas preguntas que le formularon sobre la situación actual de la Península, dijo:
“La transformación que se está operando en España, rebasa ya el marco político, social y económico: el mismo factor hombre, psicológicamente considerado, se transforma y revela tesoros completamente inéditos de voluntad organizada, de disciplina colectiva y, sobre todo, razgos [sic] de un dinamismo social asombroso, que nadie habría hasta ahora adivinado en una raza que todos calificaban de individualista por excelencia. Las peripecias de la guerra y la nueva estructuración de la vida que se lleva a cabo en estos momentos, demuestran que el hombre español es más múltiple y rico en poderes creadores de lo que se pensaba. Con el triunfo de la República, su irradiación humana alcanzará formas de universalidad mucho más grandes y profundas que en el pasado, por el concurso de este instinto colectivo, racional y organizado, que recién hace en él su aparición.
“El pueblo, sin distinción de sectores ni partidos políticos lucha en su unanimidad por un sola cosa: por un Estado republicano parlamentario democrático, fundado en anchas bases de justicia. La revolución a que asistimos, tiende a hacer accesible a la gerencia de la cosa pública a todos los ciudadanos. A este propósito, he podido constatar, en el campo y en las fábricas, que el ingreso de los obreros y campesinos a la dirección de los negocios, está dando resultados prácticos de positivo bien para la colectividad.
“El pueblo español no duda ni por un instante de su victoria final. Un vasto movimiento combativo sacude a todas las capas sociales. Todo el mundo hace la guerra. Y lo que más deslumbra es que se trata de una guerra únicamente dirigida contra los rebeldes y sus secuaces, los imperialismos fascistas coaligados, sino que se trata de una vasta ofensiva, en todos los frentes, contra el pasado: en la escuela, en las oficinas, en el libro, en el agro, en los laboratorios, en el arte,, en fin, en la carne vive [sic] del espíritu del individuo.
“Decididamente, el triunfo de la República española hará dar un salto incalculable de progreso a la humanidad. LOS PUEBLOS IBEROAMERICANOS SERÁN LOS PRIMEROS EN GANAR CON ÉL. En el interés de la democracia mundial está, por eso, defender la causa del gobierno español y combatir a su lado hasta barrer para siempre del suelo de España y de todos los países, el germen del fascismo”.
DATOS
CASI INÉDITA.
Según los investigadores, Jesús Cano, Carlos Fernández y Valentino Gianuzzi, la siguiente entrevista no está recogida en las recopilaciones que se han hecho sobre la obra periodística de César Vallejo.
REFERENCIA. El diario El Machete era comunista. Publicó la entrevista el 1 de agosto de 1937, en su edición nº 486. , p.3:, columnas 5 y 6.